NoticiaBenditos Pueblos

Pizarra y el Sagrado Corazón de Jesús

Publicado: 19/11/2020: 17163

En el corazón del Valle del Guadalhorce, a los pies de la Sierra de Gibralmora y a pocos kilómetros de la capital, se encuentra la localidad de Pizarra, siempre al amparo del Sagrado Corazón de Jesús.

Fue el IV Conde de Puerto Hermoso, Fernando Soto Aguilar, el que mandó fundir en 1916, una imagen del Sagrado Corazón en bronce y hierro colado de 2.5 metros de altura para colocarla en la cima de la sierra. Esta imagen fue bendecida en 1921 por el entonces obispo de Málaga, san Manuel González, una bendición en la que también estuvo presente el hoy beato Padre Arnaiz y parece ser que desde esa zona tan alta este último divisó unos pequeños puntos en los montes que tenía frente a él y preguntó qué eran aquellos puntos. La respuesta fue que allí vivía gente, y cuentan que en ese momento decidió ir allí a evangelizar, y así fue, era la Sierra de Gibralgalía.

Esta imagen sufrió numerosas vicisitudes a lo largo de la historia, por lo que la talla actual es obra del escultor jiennense, Miguel Fuente Del Olmo y se situó en 1995 en la parte más alta del pueblo con los brazos abiertos a Pizarra y su vega.

En esta localidad destaca la Iglesia de San Pedro Apóstol, una construcción de una sola nave de estilo mudéjar, que data del siglo XVII, pero cuyo origen se remonta a finales del siglo XV, cuando fue mandada a construir por Diego Romero, fundador del “Lugar de la Pizarra”. El aumento de la población hizo que se construyera el actual templo sobre el solar anterior. Ya en el interior del templo destaca el baptisterio que se cierra con una elaborada cancela de hierro fundido procedente del Palacio de Puerto Hermoso y contiene un lienzo de autor anónimo del primer tercio del siglo XVII que representa a San Juan Bautista, y conserva una pila bautismal de mármol del mismo siglo. También destaca la imagen del Stmo. Cristo del Perdón, considerada la obra culmen de Sebastián Santos Rojas, máximo exponente del neobarroco andaluz. Esta obra está inspirada en la imagen del Cristo de la Clemencia de la Catedral de Sevilla. Como recoge en su obra el que fuera sacerdote de la Diócesis de Málaga, Rafael Gómez Marín, “Geografía de la Iglesia de Málaga”, esta parroquia fue bendecida tras su restauración por el también obispo de Málaga y hoy beato Marcelo Spínola en 1888.

Esta localidad cuenta además con la Ermita la Fuensanta, patrona de Pizarra, construida en el siglo XVI sobre una antigua iglesia mozárabe semirruprestre. Consta de una única nave excavada en la roca y ha sufrido diferentes restauraciones hasta llegar a nuestros días. Y es que, según cuenta la tradición esta advocación se remonta a 1566, cuando al reconstruir esta iglesia mozárabe para albergar una talla de Sta. María de la Concepción brotó un manantial de agua, por lo que dedicó a la Virgen de la Fuente Santa.

También en Pizarra se encuentra el Convento Hermanas de la Cruz, cuyo fundador fue Pedro de Soto y Domecq, V Conde de Puerto Hermoso, que al ingresar como monje Cartujo, quiso dejar constancia del amor que sentía hacia la localidad. En 1955 las hermanas de la Cruz se establecieron en Pizarra y su Eucaristía de inauguración fue oficiada por Don Emilio Benavent Esquí, entonces obispo auxiliar de Málaga. Entre sus muros se encuentra la imagen de la Virgen de las Penas que pertenece a la escuela malagueña del siglo XVIII, atribuida al célebre escultor Fernando Ortiz.

El párroco de Pizarra, Marcel Lunar afirma que «desde el primer momento que llegué a este pueblo me sentí como si llevara aquí toda la vida, la gente es muy acogedora y se da una circunstancia muy curiosa porque la imagen del Sagrado Corazón, la ermita de la Fuensanta y el convento de las hermanas de la Cruz forman un acervo de fe que potencia la vida espiritual del pueblo. Son llamas de fe que iluminan la llama de la parroquia».

Pizarra en la Diputación de Málaga

Ayuntamiento de Pizarra 


 

Beatriz Lafuente

Licenciada en Periodismo e Historia. Casada desde 2011, es madre de un hijo.

beatrizlfuente
Más noticias de: Benditos Pueblos